Si buscas una alternativa a los chatbots de IA que ya conoces, Kimi AI puede ser lo que necesitas. Esta plataforma te permite conversar con un modelo de inteligencia artificial de forma rápida. Solo creas una cuenta con tu perfil de Google y empiezas a chatear. En este post te explico cómo funciona, qué modelos puedes elegir y por qué su gestor de prompts puede ahorrarte mucho tiempo.
Qué es Kimi AI y cómo empezar a usarlo
Kimi AI es un chatbot de inteligencia artificial que compite con nombres como ChatGPT, Gemini o Deepseek. El proceso de registro dura menos de un minuto: entras en la web, pulsas “Sign in with Google” y listo.
Una vez dentro, ves una ventana de chat clara: campo de texto a la derecha, historial a la izquierda. Escribes lo que necesitas y el modelo responde al instante. La interfaz está en inglés, pero entenderte y responderte en español, así como en cualquier otro idioma, no supone ningún problema.
Modelos disponibles y sus diferencias
Kimi AI te deja elegir entre dos modelos: K1.5 y K2. K1.5 es rápido y vale para tareas sencillas como resumir textos, traducir o generar ideas. K2 da pasos más largos, repasa fuentes y profundiza cuando le pides análisis complejos o código más limpio.
Puedes cambiar de modelo en cualquier momento desde un menú desplegable que aparece justo debajo del cuadro de chat. Así pruebas los dos sin cerrar sesión y compruebas cuál se ajusta a lo que buscas.
Gestión de prompts: el truco que te ahorra tiempo
La función que más me ha gustado de Kimi.com es el apartado “Common Phrase”, puedes abrirlo haciendo clic en el icono del cubo. Ahí guardas, nombras y etiquetas los mensajes o prompts que usas a menudo. Por ejemplo, si cada semana necesitas un mismo formato de tabla de contenidos, lo guardas una sola vez y lo recuperas con dos clics.
Editarlo es fácil, así como añadir nuevos prompts o eliminar aquellos que has dejado de usar. Otras plataformas obligan a copiar y pegar de bloc de notas; aquí lo tienes todo dentro, ordenado y listo. Ese pequeño detalle convierte la repetición en productividad.
Conclusión
Probar Kimi AI no cuesta nada y puede encajarte si valoras la velocidad y un espacio para tus prompts más usados. Elige entre K1.5 y K2 según la profundidad que necesites, explora el gestor de mensajes y decide más adelante si la versión de pago te compensa. Empieza hoy mismo y comprueba cuánto tiempo ahorras en cada proyecto.